Sobre Glaucoma
Sobre glaucoma
El glaucoma es una de las causas principales de ceguera permanente, y afecta a más de doce millones de personas en todo el mundo. Los ojos de una persona con glaucoma se dañan cuando se acumulan fluídos que aumentan la presión dentro del ojo. Los síntomas del glaucoma varían, y pueden incluir pérdida de la visión periférica, visión borrosa repentina y dolor de ojos. Debido a la aparición lenta y gradual del glaucoma, muchas personas no se dan cuenta de que su visión se está deteriorando hasta que es demasiado tarde. Si no se trata, el glaucoma puede empeorar hasta que se pierde la visión por completo. Por lo tanto, los controles de visión regulares son una buena idea para conocer los hechos a tiempo y adoptar cuidados o tratamientos necesarios.
- Visión normal
- Paciente con glaucoma
¿Quién está en riesgo?
Pero hay ciertos grupos que tienen un mayor riesgo de contraer la enfermedad. El riesgo de glaucoma aumenta con la edad, especialmente después de los 40. Además, las personas con presión ocular alta tienen más posibilidades de contraer glaucoma. La diabetes, miopía, presión arterial alta, raza o grupo étnico o género también pueden aumentar el riesgo. Su médico también puede preguntar si tiene antecedentes familiares de glaucoma, ya que también existen algunos factores hereditarios contribuyentes.
¿Qué es glaucoma?
El nervio óptico transmite la información visual desde el ojo al cerebro. El glaucoma es una enfermedad que aumenta la presión sobre el nervio óptico. La mayor presión provoca que el nervio óptico se dañe. Muchos no notarán la pérdida gradual de la visión hasta que ésta se encuentra gravemente disminuida, y eventualmente puede resultar en ceguera permanente. Algunos tipos menos comunes de glaucoma afectan al ojo rápidamente y puede ocurrir en un ojo por vez. Es importante saber que la pérdida de la visión a causa del glaucoma es irreversible; por lo tanto, es esencial la identificación temprana y el tratamiento para combatir la enfermedad.
¿Cómo se trata el glaucoma?
Mediante la aplicación diaria de gotas para los ojos. Si bien no existe una cura para el glaucoma, el medicamento en los ojos puede disminuir la presión ocular reduciendo la producción de líquido en el ojo o aumentar el flujo de salida del ojo.
En algunos casos, el medicamento no puede disminuir lo suficiente la presión ocular que causa el glaucoma. En estas situaciones, los tratamientos con láser o quirúrgicos pueden detener el avance de la enfermedad. Como siempre, lo mejor es hablar con su médico sobre los hechos si piensa que puede estar en riesgo.